PASOS PARA INICIAR EL CUIDADO DE LA PIEL Y MANTENER UN CUTIS SANO

El cuidado temprano de la piel es el secreto para una juventud eterna. 

 Iniciar el cuidado de la piel desde una edad temprana ayuda a sentar las bases para una piel sana y radiante a lo largo de la vida. Es muy importante identificar el tipo de piel primario, que se refiere a las categorías que conocemos como normal, grasa, seca o mixta. De ahí, el tipo de piel secundario ya sea sensible, madura o con tendencia acneica.

Adoptar una rutina de cuidado adecuada, con productos de calidad te permitirá lucir una piel fresca, luminosa, hidratada y sana. Cuidarla desde temprana edad es una inversión en belleza y bienestar que perdurará en el tiempo.

A continuación, los especialistas de la marca essence comparten cuatro pasos fundamentales para el cuidado de la piel.

1.       El primer paso es limpiar.

Desmaquillante, agua micelar y jabón facial.

Comienza y termina el día con un limpiador. Lava y masajea tu rostro todas las mañanas y noches con un limpiador suave y específico para tu tipo de piel, lo que te ayudará a eliminar las impurezas sin resecarla, dejándola fresca y lista para el siguiente paso. Recuerda no frotar tu piel sino secarla a toquecitos.

2.       Hidrata y potencializa.

Tónicos, agua de rosas y serums.

Potencializa la hidratación con un gel que contenga ingredientes naturales y enriquecido con agua de aloe vera o ácido hialurónico para proporcionar hasta 48 horas de hidratación.

Si buscas tener un suave efecto exfoliante, te recomendamos incluir un serum que brinde un suave efecto exfoliante. Un plus si es sus ingredientes se incluye el agua de kiwi y pantenol nutritivo.

Y si vas a maquillar la piel, lo ideal es utilizar un serum primer con Niacinamida, un ingrediente que regenera la piel contribuye a una tez más firme y saludable. Este ingrediente también minimiza la aparición de imperfecciones y poros. Tu maquillaje perdurará intacto y perfecto en tu rostro durante más tiempo.

Coloca una cantidad del producto del tamaño de una perla. No es necesario aplicar los tres, recuerda elegir lo que tu tipo de piel requiera.

3.       Humecta y protege.

Crema y protector solar.

Maximiza el efecto del paso anterior y aplica con un movimiento suave y ascendente, en cara y cuello una crema hidratante que ofrezca una hidratación equilibrada sin sensación grasosa, ideal para preparar tu piel antes de maquillarte o para cuidarla durante el día.

No olvides aplicar protector solar para protegerte de los dañinos rayos UV cinco minutos antes de la exposición al sol y retoca al menos cada dos horas para asegurar la efectividad. Elimina este paso de la rutina nocturna.

4.       Convierte esta rutina en un hábito.

Antes de dormir, no olvides desmaquillarte con un producto suave. La limpieza nocturna es esencial para eliminar cualquier resto de maquillaje y permitir que tu piel respire y se regenere durante la noche.

 

Recuerda que la consistencia es clave para ver resultados en tu piel. Mantén tu rutina de cuidado diario y sé paciente, ya que los cambios no ocurren de la noche a la mañana.

Hoy es el momento perfecto para conocer los beneficios de una piel bien cuidada y protegida, y tomar decisiones conscientes para preservar su salud y belleza.

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